Pulido de carrocería

En detailing automotriz, aunque a veces se usan como sinónimos, el pulido y la corrección de pintura tienen diferencias claras:

1. Pulido

Objetivo: Mejorar el brillo y eliminar defectos ligeros o superficiales.

Proceso: Se usa una pulidora con un compuesto o polish suave.

Resultados: Disimula microarañazos, reduce marcas leves y mejora el acabado general.

Ideal para: Mantenimiento estético regular.

2. Corrección de pintura

Objetivo: Eliminar defectos más profundos de la superficie (rayones, swirls, oxidación, marcas de agua, etc.).

Proceso: Implica varias etapas:

Corte agresivo

Pulido medio

Refinado o acabado final

Herramientas: Pulidoras rotativas o dual-action, pads de distintos niveles de corte, y varios productos abrasivos.

Resultados: Recupera la apariencia original (o mejor) de la pintura.

Ideal para: Vehículos con daños visibles o antes de aplicar recubrimientos cerámicos.